viernes, febrero 16, 2007

PARA PINTAR EL DESAMOR...

I
Recién lo descubro:
Nunca serán suficientes
mis manos para asirte,
ni mis palabras para encumbrarte.
Porque no he de ser,
lo suficientemente bueno;
para adorarte, ni lo amorosamente perfecto...
Para amarte.
Recién lo descubro.
Y se callan mis palabras.
II
Ciego, , que todo lo ves.
Porque ves microscopicamente
mundos habitados y
kilometricamente descubres
los àtomos que giran
desde lejanos lados.
Ciego, , que todo lo ves.
Porque te hablan mis manos
se posan en tu faz, se detienen
en tu cuerpo y mudas, bajo la cama caen.
Ciego, porque frente a ti,
un pedazo de cielo estrellado
se te pega al cabello; y no lo ves.
III
¿Cuánto amor debo pesar
en la balanza de tu corazón,
para poder mirarte?
Porque desechas mis manos,
no buscas mis nalgas,
desvías la mirada de mi ombligo,
sueñas sin palabras.
Yo, puta... nada.
IV
Pinta el desamor.
Que es todo lo que te rodea:
para toda la vida.
Has el amor con la furia
con el vacío, con la nada.
Muerete un día y ese día descubre;
lo que es amar sin distancias.
Luego, cuando te vuelvas a morir; .
que se muera de una vez por todas;
tu alma. Que yo me quedare
con palabras dichas;
sin el eco de tu mirada.
V
Los perros aullan.
la noche avanza.
Lleva la mortaja
de todo recuerdo:
De ti y de mi;
nada.
JoelLangarikaPuertoVallartaJaliscoMèxicoCRDReservados5/6/06

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Intacto en la jaula del egoismo, ahi, siempre bello, le encontrarás.

Abrazos hermano... La pasion que se va gestando y termina en un "nada" la has logrado bien. Sigue aprovechando el duende, sigue escribiendo.

Zaz

Rommy dijo...

que buen escrito has hecho esta vez, bueno como siempre...que desamor...no lo quiero vivir nunca... Gracias por tu comentario amigo.
mil besos y nos vemos

Anónimo dijo...

La pluma de tu poema firmó a fuego tu mirada, en ella solo esta el todo y el todo se sostiene en la fuente de tus palabras.

Que poema y que fuerza en cada uno de tus grandes versos poeta.

Te mando mi abrazo de mar

AnaR dijo...

Como siempre es un placer adentrarse en ese impetu inicial del amor que, a veces, perece por una parte.

Y un placer inmenso, volver a verte, literalmente.

Un beso hasta tus mares

Gustavo dijo...

Sí, es feo que no te hagan caso, otra vez, el deso no correspondido, la pasión sin cómplice. ¡Toda mi vida!

Saludos fraternales Joel