martes, diciembre 23, 2008

LA PIEL Y EL SILENCIO...

LA PIEL Y EL SILENCIO
I
Detengo mi lengua en tu ombligo.
Escucho con ella, los deseos que
bordan la tesitura de tu cuerpo
al filo del que estoy hecho.
Los silencios se hacen añicos
se entrelazan en las manos
y en las perfectas sombras que
dibujan nuestros cuerpos
en esa luz de luna rendida
en el alfeizar de la ventana.
La piel y el silencio se envuelven,
se llaman, se entregan se hacen eco,
universo, espacio y
en un tiempo destinado:
Se desbordan hasta convertirse
en polvo, sueño; cansancio.
II
En la piel,
guardamos el sueño
para inventarnos.
A veces
somos aves
planeando la piel
otras,
peces en nuestros
espacios-mares,
y tantas otras;
silencios de un grito
estallando.
Y
es,
en esos silencios,
cuando se quiebra la voz
y
se siembran mañanas
y
promesas.
III
En el silencio,
tu cuerpo
roto por mi lengua
como filoso
verso
para el papel
tan
albo de tu piel.
En mi piel,
tu
silencio,
como caracola
en
la
arena
del tiempo
dejando una
estela de esperanzas.
Mañana,
cuando la luz
invada la casa
el devenir diario
se haga eco
y
pasos
el cotidiano tiempo;
el diario trabajo:
Recuerdame
amor,
dejarte mis ojos
en
tu ombligo
y
mi
voz en tus labios. JoelLangarikaOjosNegrosBajaCaliforniaSDiciembre09/2008_________________

sábado, abril 12, 2008

Tristeza Erótica
I
Detuve el tiempo en tu partida.
Y me volví ermitaño de amores
Disfrute de mi propia compañía
y mi ombligo fue mi mundo.
Mis manos tejieron en mi sexo
las más dulces historias de ti,
te recordaron a cada momento
en que la desnudez mía,
se volvía mar tempestuoso
o playa desierta en calma.
Naufrague en la embriaguez
del olvido, dentro de mi propio olvido.
Mi cuerpo maduro esperanzas
mi maduro cuerpo desnudo
esperanzado al tuyo.
II
Te hice amor,
un templo, un mausoleo
una ermita para desearte
con cada mañana mía.
Te hice mi Dios y mi diablo
Amor te hice, y me dejaste olvidado.
Tu cuerpo es mar
para el puerto de otro cuerpo
es ola en la tempestad de la entrega,
tus labios pronuncian
la desnudez de otros labios
Y yo, te amo en el recuerdo.
Por eso, en solitario,
mis manos erigen mundos
imaginarios en mi sexo,
donde ambos; tú y yo:
Estamos orbitando.
JoelLangarikaCaboSanLucasBajaCaliforniaSurCopyrightDerechosReservados2006

sábado, enero 26, 2008

I Azul, marino que soy. Ala del viento atravezando miradas, desbordo de versos, donde zurcen olas, caracolas y mareas. Marino que soy, azul. Barcaza que pesca tormentas pescador, asi, azul que soy. II Ayer, cerre las manos. Clausure versos y gramaticas esquinas con fantasmas y cementerios sin cuerpos. Ayer, cerre con aldaba los suenos. Porque en este desierto, la lluvia no llega y mis lagrimas no caen del cielo. III A veces, se necesita un beso. uno solo. Por eso, pongo mis labios en cualquier verso, para que otros ojos, besen fugazmente el anhelo del que estoy hecho. JoelLangarikaCaboSanLucasBajaSur12/2007Copyright