sábado, octubre 31, 2009

TRIPTICO DE LA ESPERANZA...

I
La tristeza acaricia tu falda.
Eleva el aire que respiras al nubarròn
gris; que conjura lluvias.
Tus palabras se sueltan acongojadas,
se tiran al piso y caen, en el lago
que ha formado tu mirada.
No digo nada.
(...) 
Hemos dejado atràs,
en el recuerdo,

en la nostalgia,

Un pedazo de alma.

El èter no se ha vuelto un hijo

y tu vientre le llora

a la esperanza.

II


Si tenemos un hijo:
Serà un pez, un canario,

una hoja en blanco.

Si tenemos algùn dìa

un hijo:

Serà el cielo azul

la maceta florida

la fuente en el recibidor

con su agua cantarina.

Si, acaso, tenemos

algùn dìa

un

hijo.

III

Tu vientre
Amor

tu vientre.

Se viste de esperanza

y desamarra miedos

Tu vientre

Amor

tu vientre:

Fuente celestial

que no visita aùn

el àngel anunciador.

Tu vientre

Amor

tu vientre:
Lirìo y paloma

aguardando el dìa.

Joel Langarika Puerto Vallarta Jalisco Mèxico CRDReservados220908

























martes, octubre 13, 2009

ESA LUZ, CON SU SOMBRA TAN SINCERA...

Lenta la luz, que entra por la ventana.
Otoñal como mis años y frìa como mis huesos.
La luz dibuja sombras y las sombras deseos:
Otro cuerpo para escribir sonetos con la lengua,
otra desnudez para atacarnos con espadas
otra sombra sobre mi sombra, para acariciar
las luz añeja de cualquier ventana.
Una noche sin estrellas, para que mis manos
te las inventaran.
Cualquier caricia ansiosa, dibujando sùtil
el contorno de tus nalgas.
Y la luz, que entra por esa ventana,
asì, otoñal y anciana, frìa como mis huesos
dibuja con la sombra en el parquet unas palabras:
Loco
Viejo y
Puto
(...)
Ya no sueñes nada.
JoelLangarikaPuertoVallartaJaliscoMèxicoCRDReservados8/8/08


lunes, octubre 05, 2009

TRES VERSOS ENTRE CARICIAS...

I


La mañana viene lenta
da pasitos en la alcoba
se instala; se asombra.
Tú, en tu desnudez de olas
acaricias los sueños que;
apenas despiertan.
En tu ombligo deje olvidado
un verso escrito por mis labios.


II


Que sol tierno el que avanza
por la almohada.
Tu noche se desmorona y se esconde
bajo la suave cama.
El nudo que nos ata,
ese abrazo
ese nudo impostergable
ese beso venidero
y
la desnudez de las sombras:
Acarician tu mirada.


III


Desnudo obejeto de mis deseos:
Rayo de luz que ilumina
los espejos y aprisiona
el tiempo.
En la almohada
tus cabellos
y
en mis manos
tus muslos:
El reló de tu vientre
me dará la hora exácta
para levantarnos los deseos.

Joel Langarika PuertoVallartaJaliscoMéxicoCRDReservados2008sept93842